La contaminación de alimentos y bebidas puede darse de varias formas distintas durante procesos tales como el embalaje, el muestreo, la producción, el almacenamiento y el transporte.

Sin embargo, según un artículo de la revista Nutritional Outlook, hay tres tipos principales de contaminación que suele afectar a este sector. Se trata de la contaminación cruzada, la contaminación por partículas y la contaminación microbiana.

Por Victor Mijares Duran

La contaminación cruzada se produce durante el proceso de producción, cuando en una misma fábrica se produce más de un tipo de alimento y los equipos empleados para procesar esos alimentos no se limpian adecuadamente. Como resultado, la contaminación procedente de uno de los alimentos se transfiere a otro a causa de los equipos que no se han limpiado como es debido.

 

La contaminación por partículas se produce cuando las partículas diminutas en suspensión se depositan sobre los alimentos y los envases abiertos de bebidas durante el proceso de producción o el de embalaje. Este tipo de contaminación casi siempre se debe a la falta de un sistema de filtración de aire efectivo que pueda eliminar la mayoría de las partículas antes de que acaben mezclándose con los alimentos. Pero, además de los filtros de aire, las empresas de alimentos y bebidas deben comprender que la construcción y el diseño de sus instalaciones también puede dificultar o contribuir a la incubación de partículas nocivas.

La contaminación microbiana, hace referencia al crecimiento de bacterias y moho. Puede producirse por procedimientos de higiene inadecuados por parte de los empleados o debido a la presencia de humedad en las instalaciones,
procedente de fugas que pueden empeorar con el tiempo y dar lugar a la aparición de moho. Muchas bacterias y mohos pueden propagarse por el aire y, si no se eliminan eficazmente mediante filtración del aire, pueden convertirse en un problema de responsabilidad.

Soluciones de aire limpio de Camfil

En Camfil, entendemos los desafíos a los que se enfrenta el sector de la alimentación y las bebidas; por eso hemos diseñado nuestros filtros de forma que sean ultra eficientes y asequibles.

Nuestros filtros de aire poseen tres características clave que son fundamentales a la hora de eliminar las partículas nocivas de sus instalaciones:

Eficaz

los filtros de Camfil no llevan carga electrostática que puede perder rápidamente la capacidad de filtración. En su lugar, están construidos con fibras finas que mantienen su eficacia durante todo el ciclo de vida del filtro y reducen continuamente los patógenos y las partículas del aire.

Baja Resistencia

los filtros de Camfil proporcionan un flujo de aire mayor y más continuo, tres veces más extenso que el de otros filtros del mercado. Esto significa que su sistema de climatización no necesita tanta potencia para hacer circular el aire limpio por las instalaciones, lo cual ahorra energía.

Gran Capacidad

Pueden retener el doble de partículas que los principales filtros de aire del sector, sin reducir la eficacia nominal ni el flujo de aire. Esta característica ayuda a prolongar la vida útil del filtro y supone menos sustituciones, lo que permite ahorrar dinero en filtros de recambio y en los costes de mano de obra por las instalaciones frecuentes.

Durante más de 50 años, Camfil ha proporcionado soluciones de aire limpio para combatir la contaminación de alimentos y bebidas. Nos comprometemos a ofrecer los mejores productos del sector de la filtración del aire, así como a informar sobre cuestiones importantes que afectan a la calidad del aire.