La contaminación del aire interior es un riesgo grave para la salud en cualquier espacio, pero especialmente en las instituciones de atención médica y Centros de Salud, como hospitales, centros quirúrgicos ambulatorios, hogares de ancianos y clínicas dentales. Por lo que Procefil trabaja continuamente para ofrecer asesoría y productos que generen befecios por una excelente calidad de aire interior.
La mala calidad del aire se ha relacionado con una amplia variedad de resultados negativos para la salud, desde problemas respiratorios como alergias, asma y hasta infecciones nosocomiales. En otras palabras, mejorar la calidad del aire ayuda a las personas que padecen condiciones de salud existentes, pero también ayuda a prevenir cualquier otro síntoma en los pacientes.
“Muchos hospitales públicos se construyeron hace años cuando la tecnología HVAC no era tan avanzada como hoy. Prácticamente cada pieza de equipo que mueve el aire dentro y fuera de un centro de salud ha sufrido una transformación desde entonces. Como resultado, el aire que ingresa a las instalaciones más antiguas o las que no han sido actualizadas, puede no ser tratado de la misma manera que las que se benefician de los equipos e ingeniería más avanzados disponibles en la actualidad ”. explica David Blackwell, Director de Salud de Camfil USA.
¿Qué causa la mala calidad del aire en los hospitales?
Los contaminantes que causan problemas de calidad del aire en las instituciones de salud generalmente provienen de dos fuentes:
Contaminantes Externos
Son los contaminantes que provienen del ambiente exterior y que se trasladas a traves del aire en forma de partículas y moléculas. Generalmente se encuentran en áreas urbanas abarrotadas, y son provicadas por el escape de automóviles, instalaciones industriales cercanas, plantas de energía y smog en general. Pero de igual forma, por las ambulancias y hecópteros que continuamente dejan pacientes en los hospitales.
También las áreas agrícolas y rurales tienen sus propias fuentes únicas de contaminantes de los campos de cultivos o rebaños de ganado, por ejemplo.
Contaminantes Internos
Generados por las personas y equipos presentes en un hospital. Los equipos de limpieza utilizan diversos productos químicos y agentes irritantes. Los servicios internos de lavandería lavan y secan toneladas de sábanas y mantas diariamente. El servicio de comida prepara y entrega comidas en todo el edificio. El proceso de retirar los suministros utilizados en los quirófanos, como tubos o empaques de instrumentos de un solo uso, y preparar la sala para el siguiente procedimiento es una tarea importante. Por supuesto, los pacientes mismos son una fuente obvia de contaminantes al toser o estornudar, lo que puede introducir patógenos en la corriente de aire.
¿Pueden los filtros de aire ayudar a reducir los contaminantes de ambas fuentes?
Si, este es unos de los beneficios primordiales de los filtros de Aire marca Camfil, los cuales promueven una excelente calidad de aire interior. Los contaminantes de fuentes externas e internas se pueden dividir en diversas categorías:
El primero sería materiales o partículas, que la EPA define como partículas sólidas o líquidas suspendidas en la corriente de aire. Ejemplos de ello son el polen de las plantas fuera del hospital, la suciedad que se esparce en el aire al sacudir las mantas o la mucosidad de un estornudo.
Los filtros de aire para partículas están diseñados para capturar un cierto porcentaje de partículas en varios tamaños. Un filtro clasificado como filtro MERV 14 / 14A, por ejemplo, debería eliminar el 75% de todas las partículas de más de 0.3 micras, mientras que un MERV 16 / 16A debería eliminar mucho más; 95% Los filtros HEPA se utilizan para capturar aún más de las partículas más pequeñas; hasta 99.99% de todas las partículas mayores a 0.3 micrones.
La otra categoría de contaminantes que preocupa en un centro de salud son los gases o vapores. Estos se introducen en la corriente de aire desde muchas fuentes, como los humos de una ambulancia inactiva, agentes de limpieza u otros productos químicos esterilizantes y virus no deseados de pacientes enfermos.
Estos gases y vapores están controlados por filtros moleculares que a veces se denominan filtros de carbón activado. Las moléculas que forman estos vapores peligrosos o desagradables son hasta 10,000 veces más pequeñas que las partículas y se controlan mediante un proceso conocido como adsorción.
«Las instalaciones de atención médica y los ingenieros de diseño consideran el Estándar 170 de ASHRAE como una guía cuando evalúan cómo filtrar el aire para diferentes espacios dentro del hospital». dice Blackwell. “Los filtros de aire para partículas están bien establecidos en la atención médica, pero aún trabajamos para elevar el nivel de calidad del aire a medida que la tecnología mejora estos filtros con el tiempo. Los filtros moleculares para controlar los vapores peligrosos se están convirtiendo en un tema cada vez más importante a medida que comprendemos más sobre los efectos de la inhalación de estos gases “.
Mejorar la calidad del aire interior en los hospitales también ahorra dinero
Otro de los beneficios de mejorar la calidad del aire interior es que es una forma segura de ahorrar dinero. Según un estudio realizado en California, los investigadores descubrieron que mejorar la calidad del aire permitiría a los hospitales del estado ahorrar hasta $ 193,100,184 durante un período de dos años entre 2005-2007.
Si está buscando sistemas comerciales de filtración de aire para hospitales, clínicas, laboratorios y otras instalaciones de atención médica, es importante trabajar con fabricantes y distribuidores de filtros de aire con experiencia en este nicho. Durante más de 50 años, Camfil ha diseñado y construido sistemas de filtración de aire para hospitales e instalaciones de atención médica en todo el mundo. Hable con nuestro equipo hoy para obtener más información sobre nuestra línea de filtros de aire para hospitales y centros de salud.
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